Friday, October 13, 2006

Oscar Wilde: Escritor irlandés

No voy a dejar de hablarle sólo porque no me esté escuchando. Me gusta escucharme a mí mismo. Es uno de mis mayores placeres. A menudo mantengo largas conversaciones conmigo mismo, y soy tan inteligente que a veces no entiendo ni una palabra de lo que digo.

Las mujeres han sido hechas para ser amadas, no para ser comprendidas.

Uno debería estar siempre enamorado. Por eso jamás deberíamos casarnos.

Si usted quiere saber lo que una mujer dice realmente, mírela, no la escuche.

Un hombre puede ser feliz con cualquier mujer mientras que no la ame.

Lo menos frecuente en este mundo es vivir. La mayoría de la gente existe, eso es todo.

La mejor manera de librarse de la tentación es caer en ella. Perdona siempre a tu enemigo. No hay nada que le enfurezca más.

No existen más que dos reglas para escribir: tener algo que decir y decirlo.

Que hablen de uno es espantoso. Pero hay algo peor: que no hablen.

No hay nada como el amor de una mujer casada. Es una cosa de la que ningún marido tiene la menor idea.

Es bastante difícil no ser injusto con lo que uno ama.

Estoy convencido de que en un principio Dios hizo un mundo distinto para cada hombre, y que es en ese mundo, que está dentro de nosotros mismos, donde deberíamos intentar vivir.

El trabajo es el refugio de los que no tienen nada que hacer.

El arte de la música es el que más cercano se halla de las lágrimas y los recuerdos.

Cuando se está enamorado, comienza uno por engañarse a sí mismo y acaba por engañar a los demás. Esto es lo que el mundo llama una novela.

Cómo tener confianza de una mujer que le dice a uno su verdadera edad. Una mujer capaz de decir esto es capaz de decirlo todo.

Haría cualquier cosa por recuperar la juventud... excepto hacer ejercicio, madrugar, o ser un miembro útil de la comunidad.

Experiencia es el nombre que damos a nuestras equivocaciones.

Los niños comienzan por amar a los padres. Cuando ya han crecido, los juzgan, y, algunas veces, hasta los perdonan.

Adoro los placeres sencillos; son el último refugio de los hombres complicados.

Los hombres jóvenes quieren ser fieles y no lo consiguen; los hombres viejos quieren ser infieles y no lo logran.

Los músicos son terriblemente irrazonables. Siempre quieren que uno sea totalmente mudo en el preciso momento que uno desea ser completamente sordo.

Cuando me da por pensar de noche en mis defectos, me quedo dormido inmediatamente.

Lo único capaz de consolar a un hombre por las estupideces que hace, es el orgullo que le proporciona hacerlas.

Ser natural es la más difícil de las poses.

La experiencia no tiene valor ético alguno, es simplemente el nombre que damos a nuestros errores.

Cuando la gente está de acuerdo conmigo siempre siento que debo estar equivocado.

El cinismo consiste en ver las cosas como realmente son, y no como se quiere que sean.

El medio mejor para hacer buenos a los niños es hacerlos felices.

Tengo gustos simples. Me satisfago con lo mejor.

Discúlpeme, no le había reconocido: he cambiado mucho.

Cínico: un hombre que sabe el precio de todo y el valor de nada.

Como mala persona soy un completo desastre. Hay montones de gente que afirman que no he hecho nada malo en toda mi vida. Por supuesto sólo se atreven a decirlo a mis espaldas.

Ningún gran artista ve las cosas como son en realidad; si lo hiciera, dejaría de ser artista.
Después de todo, ¿qué es la moda? Desde el punto de vista artístico una forma de fealdad tan intolerable que nos vemos obligados a cambiarla cada seis meses.

Blog Archive